Privacidad en Internet para principiantes

La privacidad en Internet es algo esencial para la vida online de cualquier persona. Con el tiempo y los nuevos productos, se va incrementando la necesidad de un buen control de lo que exponemos. Es obligatorio que todo el mundo tenga en claro que el concepto de privacidad en Internet es una fantasía, al menos si la comparamos con el mismo concepto en la vida real.

Para ejemplificar lo anterior, vale aclarar que todo contenido que se encuentre en una página web está almacenado en algún lugar físico, por lo general una computadora (llamada servidor). Ese servidor lo manejan un grupo de personas, una empresa, dado que tiene que ser mantenido y actualizado. Ya, desde ese momento, alguien tiene acceso a la información que contiene. Podría también agregar que toda la información que enviás y recibís pasa por un proveedor de Internet, y ese proveedor también puede acceder a ella. Y si le sumo que todo sitio web está desarrollado por N cantidad de personas, de las cuales muchas tienen acceso a su base de datos, ahí terminamos de volvernos locos y paranóicos.

Podemos hacer una pequeña prueba de lo anterior, para entender el concepto de que todo archivo queda almacenado en algún lugar físico, vamos paso por paso:

• Entrá a tu cuenta de Facebook o alguna otra red social.
• Creá un nuevo álbum de fotos y en la privacidad, elegí que sólo vos podés ver el álbum y su contenido.
• Subí las fotos que quieras.
• Accedé a alguna de esas fotos, da un click derecho y poné «Abrir/Ver imagen» o lo más parecido que te aparezca en el listado.
• Vas a ver que te aparece la imagen FUERA de Facebook. Bueno, copiá la ruta que aparece en la barra de direcciones.
• Enviale esa dirección a otra persona y preguntale si puede ver la foto.
• Si no tenés a nadie online simplemente salí de tu cuenta de Facebook y accedé a la dirección que acabás de copiar.
• Como verás, a la foto se puede acceder igual sea cual sea la privacidad del álbum. Eso es porque estás yendo directo al archivo donde está almacenado, salteando la privacidad del sitio por el cual el archivo llegó allí.

Con esto en cuenta, es momento de empezar a pensar en los canales que queremos utilizar para compartir, mostrar y almacenar todo lo que hagamos online. Redes sociales, correos electrónicos, servicios de chat, transferencia de archivos, webcams, etc.

Internet, con su masividad y velocidad, no es para temer pero sí para respetar. Hasta el más insignificante error en el seteo de privacidad de una foto puede llevar a que aparezca en la casilla de e-mails de miles o millones de personas. La distribución de contenido online funciona como una bola de nieve en caída, siempre se hace más grande y difícil de detener. Es por ello que la solución está en nunca generarla, para evitar que empiece a rodar.

A continuación les dejo algunos puntos muy básicos a tener en cuenta para saber protegerse en Internet:

Generales

• No abrir correos electrónicos de remitentes desconocidos.
• No abrir enlaces que te envíen por correo o chat.
• Cuidado con los archivos que te envien desconocidos, hasta las imágenes pueden contener un virus o troyano.
• Los sitios que prometen revelarte contraseñas de correo, quienes te eliminaron de su MSN y, claro, los premios ganados en los cuales nunca participaste son todas mentiras para que caigas en alguna trampa.
• Las webcams pueden ser grabadas como video y luego es muy fácil distribuirlo.

Redes sociales, blogs y foros

• Cuidado con las fotos y videos que publiques, la privacidad puede saltearse fácilmente y queda el contenido accesible por cualquiera.
• Siempre es preferible evitar enviarle cosas privadas a terceros, algo que está en Internet fácilmente aparece por todos lados.
• Todas las redes sociales tienen opciones para configurar tu privacidad, como ser visibilidad de álbumes o información pública de tu perfil, configurarlo antes de comenzar a compartir cosas.

Resumen: no envies fotos ni videos a desconocidos o personas que prometan algo a cambio, cuidado con entregar datos personales por chat o usar la webcam, no abras e-mails o aceptes archivos de personas que no conozcas y no subas contenido muy privado a redes sociales / foros.

La complejidad para controlar correctamente tu privacidad online es mucho mayor, pero bien utilizado y configurado, puede funcionar a la perfección y apalancar tu exposición si eso es lo que buscás.

A no volverse loco, pero tu webcam ahora puede estar encendida porque algún troyano te infectó la máquina, y el responsable está grabando todo lo que hacés. Muejejejejeje!

Como siempre, si tenés alguna inquietud o necesitás asesoramiento para controlar tu privacidad en Internet, me podés escribir a hola@alejandrosena.com